jueves, 31 de marzo de 2016

Jueves de la Octava de Pascua

"... No acababan de creer por la alegría, y seguían atónitos ..."



De Jesús resucitado podemos captar solamente su dinamismo positivo a través de la fe.
Jesús se aparece a los discípulos, pero no en forma gloriosa y triunfal,
sino según la imagern que de él tenían  cuando estaba en la vida terrena.

Creer no es ver fantasmas, ni dar cabida a alarmas infundadas. 
Para alimentar nuestrar fe, Cristo se abaja para dejarse tocar y comer.
Se tenemos el entendimiento abierto a las Escrituras,
 comprenderemos la verdad de la resurrección
manifestada en la Eucaristía.









No obréis como los que se hallan privados de la caridad, 
no permanezcáis en el amor propio, amor a vosotros mismos.
Este ha envenenado el mundo entero.
Es ciertamente un veneno que empozoña el alma y la llena de ira;
hace cerminar el odio a Dios y a su prójimol 

[Santa Catalina de Siena, O.P.]