lunes, 28 de marzo de 2016

Lunes de la Octava de Pascua


"...No tengáis miedo: id a comunicar ..."


La resurrección de Jesús es un objeto de fe.
 El Cristo que se hace presente exige de nosotros un fuerte nivel de fe
 para reconocerlo "aparecido".
La alegría del encuentro es un compromiso serio, 
que nos debe llevar a comunicar a los hermanos la verdad de la resurrección.






 Fue necesario que Cristo resucitara para instrucción de nuestra fe, 
pues con la resurrección se afirma nuestra fe en la divinidad de Cristo,
pues, como dice san Pablo, 
"aunque fue crucificado en su debilidad,
vive por el poder de Dios".
Y así dice en otro pasaje:
"Si Cristo no resucitó, vana es nuestra fe".

[Santo Tomás de Aquino]